Actualmente, más del 40 % de los millennials peruanos —una parte clave de la población económicamente activa— prefiere realizar compras online, lo que demuestra cómo la digitalización está transformando los hábitos de consumo en el país. Uno de los cambios más significativos es el aumento del uso de tarjetas de débito como método de pago: este tipo de transacción creció 50 % solo en 2023, posicionando al Perú como el país con mayor incremento en compras online con débito en toda América Latina, según datos de Visa Consulting & Analytics.
Por otro lado, aunque más de 8 millones de peruanos ya cuentan con una tarjeta de crédito, según Experian Spanish, aún existe un amplio segmento de la población que no la posee. Esto puede deberse a la falta de bancarización, a que están recién iniciando su historial crediticio o simplemente porque prefieren usar su tarjeta de débito para la mayoría de sus operaciones.
Pensando en este perfil, la fintech peruana especializada en financiamiento digital, Powerpay, ha incorporado una nueva propuesta que permite a los usuarios pagar en cuotas utilizando solo su tarjeta de débito, de manera rápida y segura. Esta solución está dirigida inicialmente a personas bancarizadas que aún no tienen tarjeta de crédito o prefieren realizar compras con débito. Se estima que cerca de medio millón de nuevos usuarios podrían beneficiarse de esta alternativa, que amplía el acceso a un modelo de financiamiento responsable y promueve la inclusión financiera.
¿Cómo acceder a este financiamiento?
Según Juan Fernando Villena, CEO de Powerpay, solo se necesita una tarjeta de débito y un celular o una computadora. “Para acceder al financiamiento, primero evaluamos de manera sencilla y digital la capacidad de pago del usuario desde nuestra web: www.powerpay.pe, donde el cliente debe registrarse. La espera demora tan solo 3 minutos y el financiamiento puede otorgarse en 3 meses sin intereses o extenderse hasta 12 meses con una comisión accesible.”
Los montos de financiamiento van desde S/ 1,800 hasta S/ 20,000 y se aplican exclusivamente para compras. Los pagos se descuentan automáticamente desde la tarjeta de débito, sin trámites adicionales.