Hombres sedentarios enfrentan mayor riesgo de cáncer

El doctor Yan Carlos Vargas, radiooncólogo y director de Oncodrip, precisa que la actividad física puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar los tipos de cáncer más comunes entre los hombres: próstata (21.8 %), pulmón (8.6 %), colon (7.7 %) y vejiga (4.5 %). “El ejercicio fortalece el sistema inmunológico, regula las hormonas y disminuye la inflamación crónica, factores biológicos que influyen directamente en la formación de tumores”, explica el especialista.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 1,800 millones de adultos en el mundo están en peligro de desarrollar enfermedades crónicas debido al sedentarismo. Frente a esta realidad, el fomento de la actividad física se consolida como una herramienta de prevención primaria altamente efectiva.

Principales tipos de cáncer en hombres

Cáncer de próstata
Se estima que 1 de cada 9 hombres lo desarrollará. A partir de los 45 años, se recomienda realizar chequeos preventivos como el examen de antígeno prostático específico (PSA) y el tacto rectal. Un estilo de vida saludable ayuda a reducir los factores de riesgo modificables.

Cáncer de pulmón
El tabaquismo es el principal detonante, pero el ejercicio también tiene un rol preventivo. Mejora la capacidad pulmonar, reduce marcadores inflamatorios y fortalece el sistema de defensas, facilitando la eliminación de toxinas.

Cáncer de colon
El sobrepeso, la inactividad y el alto consumo de carnes procesadas elevan el riesgo. Se recomienda realizarse una colonoscopia a partir de los 45 años para detectar pólipos o lesiones en etapas tempranas.

Cáncer de vejiga
La actividad física contribuye a una mejor función renal, estimula el sistema inmunológico y ayuda a mantener el equilibrio hormonal, elementos claves para reducir este riesgo.

Recomendaciones para reducir el riesgo

El Dr. Vargas sugiere incorporar cambios simples pero constantes en el estilo de vida:

* Realizar actividad física regularmente: Entre 150 y 300 minutos semanales de ejercicio moderado pueden marcar una diferencia significativa en la salud general y en la prevención del cáncer.

* Adoptar una alimentación balanceada: Disminuir el consumo de ultraprocesados y aumentar la ingesta de frutas, verduras y fibra fortalece el organismo.

* Evitar el consumo de tabaco: Incluso el tabaquismo ocasional representa un riesgo. Cada cigarrillo afecta negativamente la salud.

* Mantener un peso saludable: La obesidad está relacionada con al menos 13 tipos de cáncer, especialmente por la grasa abdominal, que puede alterar el equilibrio hormonal y promover procesos inflamatorios.

* Realizar chequeos preventivos: Muchas neoplasias no presentan síntomas en sus primeras etapas. Por eso, los controles médicos a partir de los 45 años son fundamentales para una detección oportuna.