Filosofía Eco-Smart: ¿Cómo avanzar hacia una industria más eficiente y sostenible sin perder competitividad?

En un contexto de creciente urgencia por frenar el cambio climático y avanzar hacia una transición energética justa, las empresas del sector industrial enfrentan un reto clave: liderar el cambio sin perder competitividad. Este desafío es especialmente relevante para sectores como la minería, manufactura y agroindustria, que consumen más del 30 % de la energía eléctrica del país y generan una parte significativa de las emisiones de carbono.

Ante esta realidad, Terpel, representante de la marca Mobil en Perú, ha adoptado desde hace algunos años la filosofía Eco-Smart: un modelo integral que combina innovación tecnológica, eficiencia operativa y compromiso ambiental. A través de esta estrategia, la compañía ha desarrollado soluciones concretas para reducir su impacto ambiental, optimizar el uso energético y promover prácticas sostenibles en toda la cadena de valor.

En el marco del Mes del Medio Ambiente, Terpel compartió las claves que han guiado su transformación y que pueden servir como hoja de ruta para otras empresas:

1. Impulsar productos que generen eficiencia real
No basta con tener una visión responsable: es necesario ofrecer soluciones que realmente reduzcan el consumo energético, limiten el uso de recursos no renovables y ayuden a mitigar el impacto ambiental. Los productos sostenibles deben generar beneficios tangibles tanto para el negocio como para el entorno.

2. Invertir en infraestructura con enfoque sostenible
Modernizar las propias operaciones es fundamental. Invertir en plantas de producción eficientes, energías limpias y procesos circulares permite avanzar hacia operaciones con residuo cero y menor huella ambiental.

3. Adoptar una cultura de carbono neutralidad
La sostenibilidad requiere metas claras. Medir, reducir y compensar las emisiones de carbono debe ser parte de la estrategia del negocio. Además, es vital promover una cultura organizacional —interna y con aliados— que priorice la acción climática.

4. Conectar sostenibilidad con rentabilidad
Ser sostenible no implica renunciar a la competitividad. La optimización de recursos reduce costos operativos y mejora el desempeño económico. Bien implementada, la sostenibilidad impulsa el crecimiento a largo plazo.

La filosofía Eco-Smart no solo es viable, sino estratégica. Al integrar sostenibilidad, eficiencia y tecnología en cada etapa del negocio, las empresas industriales pueden reducir su impacto ambiental, fortalecer su competitividad y generar valor duradero. El camino hacia una industria más limpia y resiliente empieza con decisiones conscientes, acciones concretas y un firme compromiso con el futuro del país.