Paola Arapa
Nuestro cuerpo está compuesto por diferentes tejidos entre ellos los huesos, músculos, tendones, cartílagos, entre otros. Las articulaciones son fundamentales en nuestra vida diaria, pero suelen ser las partes del cuerpo a las que menos atención le prestamos, pese a su constante uso. Mantenerlas saludables es esencial para evitar dolor y rigidez, y para ello, una combinación de ejercicio, hidratación adecuada y una alimentación balanceada puede marcar la diferencia.
Talía Pinto, miembro del Consejo Consultor de Nutrición de Herbalife, enfatiza: «El cuidado de las articulaciones no solo depende del ejercicio y el descanso, sino que la alimentación cumple un rol crucial. El movimiento regular ayuda a evitar la rigidez articular y fortalece los músculos que rodean las articulaciones. Además, mantener un peso adecuado es clave para reducir la presión en las articulaciones, ya que el sobrepeso puede deteriorar su estructura y función».
Adoptar buenos hábitos, como la hidratación adecuada y una alimentación rica en alimentos que promueven la salud articular, es igualmente importante. Las articulaciones y los cartílagos, al estar formados en gran parte por agua, se ven beneficiados de una correcta hidratación para el mantenimiento de su elasticidad y lubricación.
Consejos para contribuir a mantener articulaciones saludables:
- Hacer ejercicio regularmente: Ayuda a evitar rigidez y fortalece los músculos que soportan las articulaciones.
- Mantener un peso adecuado: Alivia la presión sobre las articulaciones.
- Hidratación adecuada: Lubrica las articulaciones.
- Cúrcuma: Los curcuminoides actúan como antiinflamatorios naturales apoyando el bienestar articular.
Cuidar nuestras articulaciones es una inversión a largo plazo en nuestro bienestar general. Incorporar estos hábitos simples en la rutina diaria puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida.
