Paola Arapa
Las ojeras son una preocupación común para muchas personas, ya que afecta la apariencia del contorno de los ojos, dando un aspecto cansado o envejecido. Existen diferentes tipos de ojeras, cada una con características distintas y tratamientos específicos.
La doctora Jacqueline Ladera, especialista del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, explica que para prevenir la aparición de ojeras es clave hidratar la piel, usar protector solar, dormir lo suficiente, seguir una dieta equilibrada y rica en nutrientes, y limitar el consumo de alcohol.
A continuación, la especialista señala los diferentes tipos de ojeras para que las personas puedan reconocerlas y realizarse tratamientos adecuados:
- Ojeras hundidas: Aparecen como un surco profundo que va desde el lagrimal hacia la mejilla, dando un aspecto fatigado. Para tratar estas ojeras se recomienda el uso de ácido hialurónico, logrando resultados inmediatos en una sola sesión.
- Ojeras por envejecimiento: Se caracterizan por la aparición de arrugas de expresión, pliegues y patas de gallo alrededor de los ojos. Su tratamiento ideal es la mesoterapia con NCTF o JALUPRO. Este procedimiento requiere entre 3 y 4 sesiones, con resultados visibles a las 4 semanas.
- Ojeras azules o vasculares: Se presentan con un tono azulado debido a la acumulación de sangre en los capilares de la zona. El láser CO2 es una opción eficaz para tratar este tipo de ojeras, con resultados visibles en aproximadamente un mes, dependiendo del paciente.
- Las ojeras hiperpigmentadas: Son de tono anaranjado o marrón y son más notables en pieles oscuras. Se tratan eficazmente con peelings, mostrando resultados en unos 15 días, aunque el número de sesiones varía según el paciente.
El tiempo necesario para observar resultados depende del tipo de ojera. Mientras que las ojeras hundidas ofrecen mejoras inmediatas, las ojeras por envejecimiento y las vasculares requieren más tiempo.
Tras el procedimiento, se recomienda aplicar compresas frías el primer día para reducir la inflamación, evitar frotar la zona tratada y esperar al menos 30 minutos antes de aplicar crema o protector solar. Si es necesario, puede usarse una crema específica para hematomas y es aconsejable evitar ejercicio físico intenso durante las primeras 48 horas.
Con los tratamientos y cuidados adecuados, es posible lucir una mirada más fresca y rejuvenecida. Se recomienda consultar con un especialista para determinar el tratamiento más adecuado para cada paciente.
