Lima.- Durante los últimos meses, las bajas temperaturas en el país han generado que muchas personas tengan un mayor cuidado con su piel. El frío extremo, el viento y la humedad, pueden afectarla negativamente, causando resequedad, agrietamientos e incluso afecciones como la rosácea, si no se toman las precauciones necesarias.
Según datos del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (SENAMHI), regiones como Puno, Cusco, Junín y Huancavelica serían las más afectadas. En Lima la temperatura podría disminuir en 12°C. Lo cual exige cuidados especiales para mantener una piel saludable.
Para ayudarte a proteger tu piel en esta temporada, Nandy Vega, subdirectora de los Centros Médicos de MAPFRE, recuerda la importancia de no auto medicarse y visitar a un especialista de manera oportuna. “Con la cobertura de tu Seguro de Salud puedes agendar citas virtuales o presenciales con tu dermatólogo para evitar alergias y afecciones con estos cambios de temperatura. Replicar tratamientos que vemos por Internet podría ser perjudicial”, indica.
Además, la especialista nos propone 5 maneras de cuidar la piel durante este invierno:
- Hidratación constante
La exposición al frío y al viento puede eliminar la humedad de la piel, dejándola seca y propensa a irritaciones. Es crucial hidratar la piel diariamente con cremas humectantes que contengan ingredientes como la glicerina o el ácido hialurónico, que ayudan a retener la humedad.
- Protección solar todo el año
Aunque muchas personas asocian el uso de protector solar con el verano, es esencial aplicarlo durante todo el año. En altitudes elevadas como las que se encuentran en la Sierra peruana, la radiación UV es más intensa, lo que puede dañar la piel incluso en invierno.
- Evitar baños con agua muy caliente
Aunque puede ser tentador tomar duchas calientes para combatir el frío, el agua caliente puede despojar a la piel de sus aceites naturales, dejándola seca y vulnerable. Es preferible usar agua tibia y limitar la duración de los baños.
- Vestimenta adecuada
El uso de ropa adecuada que cubra y proteja la piel del viento y del frío es fundamental. Se recomienda el uso de bufandas, guantes y gorros para proteger las zonas más expuestas, como el rostro y las manos.
- Alimentación saludable
Una dieta rica en antioxidantes, vitaminas y minerales también es clave para mantener la piel en buen estado. Consumir alimentos como frutas, verduras y frutos secos puede ayudar a fortalecer la barrera protectora de la piel.
El cuidado de la piel durante el invierno es esencial para prevenir problemas de salud y mantener una apariencia saludable. Usa la cobertura de tu Seguro de Salud para generar una cita con tu dermatólogo, y obtén ayuda profesional según tu tipo de piel.