Paola Arapa
Ser un adulto mayor con autonomía es fundamental para tener una buena salud mental, ya que la persona tiene la capacidad de controlar, afrontar y tomar decisiones personales de cómo desarrollar las actividades básicas de la vida diaria como bañarse, vestirse o ir de compras sin necesidad de estar acompañado. Esto hace que se sienta útil, animado y con una autoestima elevada, así lo indica el geriatra Luis Sandoval de la Clínica Ricardo Palma.
Para fomentar la independencia de los adultos mayores, es importante que mantengan una alimentación balanceada que les proporcione todas las vitaminas, minerales y antioxidantes necesarios para su edad; se fomente la práctica regular de ejercicios para mantener su flexibilidad y estabilidad; se promueva el hábito de la lectura; se incentive una vida social activa; y se asegure su asistencia a controles médicos periódicos para obtener diagnósticos precoces y modificar hábitos si es necesario.
En este sentido, el doctor Sandoval explica que durante la consulta del adulto mayor se realiza la llamada Valoración Geriátrica Integral (VGI): aspecto nutricional, estado físico, enfermedades concominantes (comorbilidades), estado mental, grado de autonomía, se usa la llamada escala de Katz para definir si el paciente necesita mayor apoyo, en caso de ser considerado frágil.
Luego de efectuar la VGI se hace un análisis de matriz FODA: Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas con el objetivo de establecer estrategias de acción personalizada. Por ejemplo.
- (F)ortalezas: Apoyo familiar, voluntad de colaborar.
- (O)portunidades: Programas de rehabilitación, medicina preventiva, programas municipales.
- (D)ebilidades: No cumplir con tratamiento recomendado, no vacunarse, aislamiento.
- (A)menazas: Reingresos por emergencias frecuentes, deterioro hasta llegar a la fragilidad.
Después de la VGI y el análisis de la Matriz FODA, el especialista refiere que se elabora el Plan de Cuidados Geriátricos o Plan Estratégico Integral, con metas propuestas y monitoreo de los logros de los objetivos fijados. Por ejemplo, recuperación después de un infarto cerebral, control de azúcar si es diabético o del colesterol elevado, aumento de masa muscular, disminución de mareos o caídas, entre otros.
Con buenos hábitos y con un control médico regular se puede ser un adulto mayor autónomo, feliz y saludable dentro de sus parámetros. Disfrute al máximo cada etapa de su vida.
